La República 18 de junio de 2011
COLORADOS
2.0
Pedro Bordaberry empezó un proceso
transformación en el Partido Colorado y logró, después de muchos años, remover del
CEN a Sanguinetti y otros dinosaurios del Foro Batllista. Este cambio era a
todas luces necesario después de la estrepitosa derrota del 2004, donde apenas
superaron el 10% de los votos.
Desde que Pedro está al frente del partido su
estrategia se enfocó en acercarse al electorado
más joven a través de las campañas publicitarias (en sus manifestaciones más
clásicas) pero sobre todo a través de Internet. De hecho el twitter de
Bordaberry debe tener tantos posteos como el de Zaira Nara. A su vez en 2011, para celebrar los cien años de las
reformas batllistas, los colorados modernizaron su página web con nuevo diseño
y más prestaciones. Por ejemplo ahora se pueden ver las sesiones de la
Convención Nacional en vivo. No cabe duda que es un avance pero dudo de su
eficacia para competir por la atención de los jóvenes frente al último video
clip de Lady Gaga. Por su
parte, el que sí ha logrado captar la atención de los jóvenes (y los amantes
del cine clase B) fue Abdala con sus
“alocados” videos difundidos por la red. Nadie sabe exactamente qué fue
lo que le pasó al “Turco”, pero se especula que el traumático proceso de “des-soldadización”,
luego que Sanguinetti y su séquito le patearan en el culo, pudo causarle un
cambio en el metabolismo. Dicho en otras palabras, que le saltara la térmica.
Aunque como siempre hay dos bibliotecas, otros sostienen que sus
correligionarios ya empezaban a percibir sus desbordes histriónicos y eso
provocó que lo bajaran del escenario.
Lo paradójico de esta apuesta por la
juventud es que Uruguay está en 2º lugar en Latinoamérica en cuanto al
envejecimiento de su población y, en el primer quinquenio del siglo, llegó al
alarmante punto en el cual la tasa de
fecundidad cayó por debajo del nivel de reemplazo poblacional. Actualmente el
porcentaje de adultos mayores de 60 años está cerca del 20%. El doble que los
votantes del Partido Colorado en 2004, y buena parte de ellos seguramente sean
los “históricos” seguidores del Foro y los heredados de la UCB de Pirán y
Millor. También sorprende que sus canales de comunicación pretenden acercar al
partido a los ciudadanos más jóvenes pero hoy sean los abanderados de la campaña
por la baja de la edad de imputabilidad, lo que se podría considerar como parte
del discurso más retrógrado de nuestro escenario político. A su vez, el
diputado Fernando Amado, a quien uno ubicaría como “el soldado” de Vamos
Uruguay y el más joven de su fuerza política, en estos momentos está un poco
distanciado de su líder, entre otras cosas por su propuesta de despenalización
del aborto, confrontando otro de los discursos más conservadores de nuestra
sociedad. En definitiva, Bordaberry se está alejando del representante más
visible de la renovación de su partido, aunque Amado tampoco pueda ocultar su fascinación
por cosas tan arcaicas como el Opus Dei y Oscar Magurno.
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